Lagoon 55, para soñar despiertos

Fotos: Nicolas Claris y CP

Desde 1987 el Lagoon 55 ha sufrido diversas actualizaciones, todas fieles a su ADN de innovación, calidad y cuidados detalles para un catamarán con posibilidades oceánicas.   

Carlos Pich

9 Julio 2021

Para el astillero de Burdeos todo empezó en 1987 cuando construyó su primer catamarán, un 55 pies que ha resistido el paso del tiempo en sus posteriores versiones. La última que probamos cierra, momentáneamente hace cuatro décadas.

Botada esta primera unidad en marzo pasado, el astillero no tiene previsto iniciar su producción hasta marzo de 2022. Mientras tanto, con buen criterio está sometiendo al Lagoon 55 a un exhaustivo periodo de pruebas. Tanto es así, que su Director Comercial Thomas Gailly nos explicó que en breve botarán un segundo prototipo variando la configuración de cabinas y otros detalles, e incluso antes de final de año probarán un tercer prototipo.

Todo ello para poder asegurar la fiabilidad, el buen funcionamiento de los sistemas y detectar pequeños detalles que merezcan mejorarse. Porque el concepto general lo tienen muy claro y verdaderamente está muy logrado. Sin bancos en la popa de la bañera, se mantiene un mismo nivel desde la cabina interior hasta la plataforma de popa alzada. Las vistas son inmejorables y la sensación de estar en el mar se vive plenamente sin ser conscientes de ello.  

Invita a navegar sin fecha de vuelta

El barco que pudimos probar en Port Ginesta era la versión cuatro cabinas, e incluía algunos extras tanto en lo referente a prestaciones (motores más potentes Nanni en vez de los Yanmar de serie; vela mayor con 5 m2 suplementarios de superficie y Código 0) y un equipo de electrónica B&G con cámaras de visión hacia popa. Al carecer de la tarifa de precios definitivos se nos escapan otros posibles accesorios extras. En cualquier caso, si nos confirmaron el precio de la unidad probada, situado en 1.179.720 € sin impuestos.

Más allá de su ya respetable eslora, el Lagoon 55 nos agradó por ser un barco lógico. No se pretenden ideas “ingeniosas” en su diseño ni en sus soluciones, por contra todo está equilibrado y bien resuelto. A nivel de habitabilidad, sus cuatro cabinas derrochan espacio y desahogo, permitiéndose una suite para el armador en el flotador de estribor. El resto de camarotes incluye su aseo independiente, con cabina de ducha cerrada y espacio sobrado el resto.  Además de esta, el astillero propone otras versiones con cinco o seis camarotes, manteniendo en cada uno de ellos su propio aseo.

Múltiples zonas de vida a bordo, con profusión de mesas y solarios

Ofrece un buen volumen de estiba bien compartimentada en todos los camarotes, y una zona de armarios suplementaria el descansillo del flotador de babor, donde ubican una nevara grande, que complementa la de la cocina. En la cabina superior, encontramos cofres grandes bajo el suelo, además de los armarios y cajones de la cocina. En el exterior no faltan cofres de gran tamaño bajo el piso de la bañera. La profusión de ventanas, escotillas y portillos en los camarotes y sus aseos garantizan una buena ventilación, así como una enviadle iluminación natural, incluso vistas hacia el mar en los dos camarotes de popa. En la cabina principal la visibilidad no ofrece eros, ni tampoco la ventilación extra que permite una de las ventanas del parabrisas frontal.   

 Destacaba Monsieur Gailly que el Lagoon 55 ofrece tres mesas para al menos 8 plazas. La del salón interior con mesa regulable en altura, la de la dinette en la bañera para12 y la del flybridge capaz de reunir diez personas. La profusión de solarios también es destacable. En la parte delantera del fly cuatro amplias plazas, en la parte trasera a modo de tumbona más corta otras 5 o 6 plazas, y la zona de proa también permite tumbarse cómodamente sin montar accesorios a dos personas. Esta zona de proa, cuenta con un imprescindible toldo bimini para sombrear cuando el sol apriete. La estructura en esta zona delantera combina trampolines a cada lado del refuerzo central que sirve para conducir la cadena de fondeo hasta su molinete y cofre, con suelo rígido delante del frontal de la cabina. Y casi me olvido de otra plaza de solario, ésta el lateral de la bañera. Un sitio estratégico cuando se busque un poco de tranquilidad, para sestear o desconectar un rato de los compañeros de viaje.

Fácil de disfrutar, sencillo de maniobrar

Pensando en navegaciones estivales costeras, la popa del barco es casi perfecta. Dispone de una plataforma hidráulicacapaz de sumergirse unos 50 centímetros y facilitar la carga o descarga del tender. Adiós a los pescantes y sistemas de izado/arriado. Un accesorio escamoteable en su piso acomoda el apoyo de la carena, y un extremo de la plataforma plegable permite mantener el fueraborda bajado o recogido que toque la hélice. Las dos jupettes permiten bañarse cómodamente, en caso de no utilizar la plataforma como una opción para el baño. En estribor casi nos pasa por alto un pequeño asiento plegable que mira a popa. Acaso un buen sitio para controlar las travesuras de los más jóvenes en el agua, pero también donde lanzar una caña para capturar la cena, que podremos cocinar en el grill dispuesto en el faldón de babor.

 Pese a que estamos hablando de un 55 pies de eslora, el equilibrio de su diseño y buen funcionamiento te hacen olvidar por momentos de su talla. También la buena disposición de la maniobra, toda reenviada al frontal del flybridge, donde podíamos trabajarla con la ayuda de tres winches eléctricos. Transite la sensación de que dos personas lo controlan con suma facilidad. Incluso para amarrar, nuestro barco disponía de cámaras hacia popa, visibles en la gran pantalla B&G del puesto de gobierno, que queda claramente separado de la zona de ocio. El acceso al fly es por babor, pero existe la opción de incluir otro en estribor, justo entre al respaldo del asiento doble de gobierno y la dinette.  Tal vez una buena opción pensando en la mayor rapidez e inmediatez si hay que descender con cierta urgencia.

Se intuye buena navegablidad y prestaciones, a este Cata fácil de maniobrar

El barco tiene otros detalles que le honran, y uno de ellos es la visibilidad de las velas. El techo del fly tiene tres ventanas, un transversal y dos longitudinales, desde donde podemos ver la mayor y la parte alta de las velas de proa. Además, desde el salón interior podemos asimismo ojear el aparejo también desde sendas ventanas en el techo que las colchonetas del solario cubren. En navegaciones largas, está claro que éstas se desmontan y tenemos así una posibilidad de ver cómo están trimadas las velas sin necesidad de salir al exterior. La botavara de carbono pintada en blanco, tipo Park Avenue, facilita que la mayor quede recogida al arriarla. La posición retrasa del mástil facilita las viradas evitando que el foque autovirante roce.  

No todo puede ser perfecto en este oficio nuestro de navegar y probar barcos, porque Eolo tiene bastante que decir. Nos tocaron en suerte unas condiciones extrañas en el litoral barcelonés. Viento de 5-7 nudos y una ola de fondo cruzada al viento, que desestabilizaban un poco al catamarán y sus velas. Con la sensación de “ir parados”, el GPS te saludaba con unos 6 nudos de velocidad, navegando a un ángulo de 75º. Los 154 metros del Codigo 0 en vez de los 74 del foque autovirante permitían esta buena marcha, quedándose un servidor con las ganas de haber podido izar el spi asimétrico de 272 m2. Pero no duden del buen navegar de este catamarán, no en vano hay más de 1.000 navegando unidades de la marca desde que iniciaron su andadura, precisamente con el primer 55 pies de su saga, también diseñado por los reconocidos VPLP. Dos argumentos que tranquilizan mis rotundas afirmaciones.

A motor, una velocidad de carretera y manta son los 8,2 nudos con los Nanni girando a 1.800 rpm, instalados con hélices de cuatro palas plegables. Tanteando su máxima velocidad, a 2.650 vueltas alcanzamos 9,5 nudos, y a dos mil vueltas el GPS indicaba 8,8 nudos. Cuando se trate de navegar al mínimo, engranada la transmisión al ralentí (770 rpm) el barco navegaba a 3,8 nudos.

 

DATOS TÉCNICOS

Eslora Total 16,56 m
Eslora Flotación 16,39 m
Manga 9,00 m
Calado 1,55 m
Altura Máxima 29,43 m
Desplazamiento 127.700 kg
Velas Ceñida
185 m2
Agua Dulce 2 x 240 L
Combustible 2 x 550  L
Motorización Nanni N4.115
Potencia 2 x 115 HP
Cabinas 4 dobles
Categoría CEE de A-14 a D-30
Arquitectura VPLP Design
Diseño Exterior Patrick le Quément
Diseño Interior Nauta Design
Astillero Lagoon Catamarans

 

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